estoica ciudad la mansedumbre
ahogando cada día
en una insólita rutina
...
y ver los días irse
azules, descompuestos
y asistir al entierro
de lo que pudo haber sido
sin una flor ni ofrenda
sólo el cuerpo en vigilia
sólo la carne tierna
que espera nacer de nuevo
mañana
otra vez
ahogando cada día
en una insólita rutina
...
y ver los días irse
azules, descompuestos
y asistir al entierro
de lo que pudo haber sido
sin una flor ni ofrenda
sólo el cuerpo en vigilia
sólo la carne tierna
que espera nacer de nuevo
mañana
otra vez